Banco Sabadell acaba de lanzar Sabadell Wallet, una innovadora solución que, mediante NFC, convierte los smartphones en un medio de pago que puede utilizarse en cualquier TPV equipado con tecnología contactless (actualmente, más de 800.000 en toda España). Así, como tan solo aproximar su smartphone al terminal de punto de venta –tras teclear su número secreto- los usuarios de este producto podrán pagar sus compras en todo tipo de establecimientos comerciales.
Para utilizar Sabadell Wallet los usuarios deberán disponer de un smartphone con un sistema operativo Android (con versión, como mínimo, KitKat) y disponibilidad de NFC. Para los smartphones que no dispongan de esa tecnología, Banco Sabadell ofrecerá un sticker que podrá adosarse al terminal.
Esta nueva herramienta de pago, única en España puesto que se trata del primer wallet incorporado a smartphones con capacidad multimarca, ya ha entrado en funcionamiento. Sabadell Wallet se ha lanzado, en una primera fase, entre empleados de la entidad para detectar posibles mejoras. Está previsto el lanzamiento comercial a clientes el próximo mes de julio, versión que incorporará además la marca VISA.
El inicio de una nueva etapa en los sistemas de pago
Esta nueva tecnología comporta, de hecho, dar un vuelco a los sistemas de pago tradicionales. Convertir a los smartphones en medios de pago útiles, ágiles y totalmente seguros supone la llegada de un nuevo paradigma debido, sobre todo, a las enormes capacidades tecnológicas de los smartphones, que abren todo un universo de posibilidades que está a años luz de las que ofrecían las tradicionales tarjetas “de plástico”.
A partir de este momento, los smartphones inician un camino que, previsiblemente y a corto plazo, podrá ofrecernos otras posibilidades como las de gestionar nuestros pagos periódicos, sugerirnos financiación para nuestras compras si lo necesitamos o, aprovechando sus capacidades de geolocalización, determinar en qué punto de caja nos encontramos dentro de una gran superficie, generando y almacenando un tique de compra por si fuese necesario recuperarlo en el futuro, almacenando también la correspondiente factura que puede actuar como certificado de garantía.